domingo, 13 de diciembre de 2009

¡Si ellos dicen la Verdad, Seguiremos Mintiendo!

Ante los bombardeos mediáticos y fascistas hacia los jóvenes por señalarnos como responsables de la inseguridad con discursos falsos que pretenden callarnos. Y porque no sólo somos el presente, sino que también somos el futuro. Nosotros proclamamos:

•No a la baja de la edad de imputabilidad.

•No al pisoteo de los derechos de los niños y jóvenes.

•No a las restricciones horarias como medidas represivas.

•No al abuso del poder de la corrupta bonarence.Responsables de la desaparición de pib*s en democracia.

•No a las leyes para jóvenes pensadas por adultos que no nos representan.


Los jóvenes tenemos derecho a ser, y a expresarnos, porque somos victimas y no victimarios. Que se busque a quienes son los verdaderos responsables de la exclusión y la marginalidad social.

NINGUN PIBE NACE CHORRO. SER JOVEN NO ES DELITO.

lunes, 26 de octubre de 2009

jueves, 8 de octubre de 2009

Voz, verdad, política

Sobre la ley de Servicios de Comunicación AudiovisualDicen que para muestra sobra un botón. Pues bien, vaya entonces un botón de muestra de lo que es la Ley de Radiodifusión de la dictadura: según la norma, vigente al día de hoy, la autoridad gubernamental que debe regular la actividad y el direccionamiento de los medios masivos de comunicación está integrada por 5 miembros: uno por cada una de las fuerzas armadas, un representante de los empresarios y otro nombrado por la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE). Debe quedar más que claro que este hecho resume el espíritu que domina toda la ley, al igual que aquellos que prohíben la participación del Estado en la comunicación y la de los medios sin fines de lucro (como las cooperativas). Si bien algunos de estos puntos fueron parcialmente modificados durante este último tiempo, es imprescindible tener en cuenta que la ley actual busca explícitamente el control estatal, la imposición de valores “occidentales y cristianos”, la concentración de los medios y una concepción meramente comercial de la comunicación.Lo anterior justifica, por sí, la necesidad imperiosa de una nueva ley. Que se adecue a los principios de una sociedad democrática. Que reconozca que el Estado debe tener un rol fundamental en la regulación, para impedir el avance desmedido de unos por sobre otros, así como para asegurar el acceso a la información a aquellos a quienes las empresas abandonan porque no les resulta rentable proveerles su servicio. Que favorezca el acceso a las licencias a quienes hacen de los medios una herramienta para transmitir sus ideas y no para obtener ganancias, como por ejemplo las cooperativas, las universidades, los sindicatos, los pueblos originarios, etc. Que, finalmente, en un mundo cada vez más marcado por la influencia incontenible de los medios masivos de la comunicación, conciba a la información como un derecho y no como una mercancía, derecho que para que sea cumplido de manera real debe estar garantizado por una pluralidad de voces… pluralidad que hoy no existe.Hay en todo este asunto una verdad tan evidente como ocultada: democratizar el acceso a la información implica avanzar sobre la posición privilegiada de quienes hasta hoy han gozado del esquema de concentración, constituyendo así un poder no-institucional que, en muchas ocasiones, hasta se ha llevado puesta la institucionalidad misma. Es esta verdad justamente la que explica el silencio con que se ha condenado desde los medios masivos algunas otras verdades, así como la amplificación que han tenido tantas mentiras infames.Resulta tragicómico escuchar que esta es una ley que nace de la vocación totalitaria del gobierno. No interesa aquí discutir si existe tal vocación; pero es necesario decir que el proyecto de ley se basa en los puntos desarrollados por la Coalición por una Radiodifusión Democrática, un colectivo heterogéneo, respetado y citado por todas las fuerzas políticas, que desde hace cinco años viene trabajando este tema y logró 21 puntos de consenso que han sido tomados casi en su totalidad por la propuesta oficial. También es dramático y gracioso ver a los opositores denostar la ley invocando los “21 puntos” mientras aquellos que los redactaron les pedían por favor que apoyaran la iniciativa.Indigna escuchar que esta ley no ha sido discutida, cuando –además de los años de trabajo de la Coalición- el proyecto de ley recorrió el país y se debatió en decenas de foros en donde participaron académicos, trabajadores, sindicatos, ong’s, partidos políticos, medios comunitarios, pueblos originarios y todo aquel que estuvo interesado en el tema. Quienes sostienen que estos foros no son representativos (o que han sido todos comprados por el oficialismo) transpiran el sudor rancio de la soberbia iluminista, tan propia del siglo XIX, y manifiestan un desprecio tan furioso por la inteligencia del pueblo que no merecen ni siquiera respeto.Se nos miente cuando se afirma que la ley promueve la concentración totalitaria de los medios en poder del Estado. La nueva autoridad de aplicación será un órgano plural, con participación de las fuerzas políticas opositoras. Algunos plantean que la mayoría de la fuerza oficialista es un sesgo autoritario, como si no fuera el poder ejecutivo el que debe fijar las políticas que regulan un tema tan importante. ¿Deberían acaso conducirlo las fuerzas opositoras, que por definición, representan a una porción minoritaria de la sociedad? ¿No es esto acaso otro insulto a los mecanismos democráticos? La presencia de opositores en el órgano ejecutivo no está pensada para que sean éstos quienes le fijen el rumbo, sino para que ninguna decisión pueda ser tomada en la penumbra de la impunidad. Pero si eso resultara insuficiente como mecanismo de control, se crea también un amplio consejo asesor, con funciones importantísimas como realizar los pliegos de licitación de licencias y elegir a los jurados. Y si ello no alcanzara, se crea también una comisión bicameral de seguimiento. Y se instituye el “defensor del público”.¿Cuántos más controles se le puede pedir a una ley? ¿O será que la oposición le pide a una ley que sea más que la ley misma, que garantice aquello que no puede garantizar jamás, que deje de ser ley para ser realidad efectiva? Se y nos engañan quienes se oponen con estos argumentos. Una ley, por definición, no puede evitar jamás que alguien haga un uso indebido de ella; por algo existe el refrán que reza “hecha la ley, hecha la trampa”. De lo que se trata es de que la ley fije los mecanismos de control y los derechos para que luego éstos puedan ser demandados y protegidos en caso de una violación.En otras palabras, no se le puede pedir a una ley que haga lo que debe hacer la política.Y llegados a este punto, entonces, es necesario señalar –con preocupación- que muchas fuerzas políticas están usando argumentos para oponerse a la ley que atentan contra la política misma. Y este es un pecado imperdonable cuando lo cometen quienes hacen política, porque cuando muere la política festejan las corporaciones dominantes y se fija por decreto la impunidad.Ahora bien, si este pecado es nefasto en sí, cuando lo cometen sectores “progresistas” o de izquierda se vuelve execrable.Esta es una oportunidad histórica no sólo para tener una nueva y mejor ley de servicios de comunicación audiovisual, sino para que el campo popular consolide una victoria política enorme y un avance sin precedentes en términos de acumulación de capacidades, de experiencia y de posibilidades.Quienes se paralizan frente al miedo de que un gobierno –este o cualquier otro- pueda utilizar esta ley en beneficio propio, ignoran que esta ley es el resultado de años de lucha de compañeros y compañeras y que, afianzarlo, implica un triunfo valioso. Reconocer este hecho no quiere decir renunciar a ideas, casarse con el partido de gobierno o pretender que hemos llegado al límite de nuestras posibilidades.Por el contrario, supone que hemos dado apenas un paso más en un camino de lucha que sigue siendo largo y cuesta arriba, pero un paso que nos posiciona mejor para encarar nuevas batallas, que nos permite unirnos y articular mejor nuestros esfuerzos, que nos anima a proponernos como impulsores de una transformación que trasciende a las personas u organizaciones que circunstancialmente se encuentran a favor o en contra.El avance es parcial, es cierto; tan cierto como que renunciar a las mejoras por aspirar a la totalidad implica la más absoluta parálisis. Y parálisis es antónimo de política, que por definición es movimiento y cambio; “Un ánimo que aspira a la totalidad está muerto aunque pretenda ser bello”, escribió Hegel alguna vez.Por eso, avancemos, cambiemos, transformemos. Construyámonos como actor, construyamos un nuevo sentido común, construyamos una nueva realidad. Y no dudemos que, aun con limitaciones, esta nueva ley de Servicios de Comunicación Audiovisual es un gran paso en ese sentido.

Miguel Martínez
Sec. Gral. del Centro Socialista "Alfredo Bravo" de Morón
Asesor del Diputado Ariel Basteiro
Lic. en Ciencias Políticas en la UBA

viernes, 18 de septiembre de 2009


Con su ejemplo, seguimos escribiendo.

El 16 de septiembre fueron secuestrados estudiantes secundarios en la cuidad de la plata, quienes luchaban por el boleto estudiantil secundario. Este hecho de violación a los derechos humanos, es un tema pendiente de no olvidar. Es por eso que ese día fue declarado “DÍA DE LOS DERECHOS DEL ESTUDIANTE SECUNDARIO”. Por esto la importancia de la participación, de la memoria activa para no repetir el pasado, de los que sufrieron la intolerancia y el autoritarismo; cuyos objetivos del gobierno nefasto de los militares fue neutralizar a buena parte de la juventud, ganar a una porción para su propio proyecto reaccionario, y con le resto, los métodos de acción fueron variados. Para los que no encajaban a sus esquemas, se aplicaba distintas medidas, desde el asesinato a la desaparición, hasta las más refinadas formas de marginación psicológico y social. Ese mismo boleto, que es el pase que usamos todos los días, fue la lucha de ellos y muchos otros que no bajaran los brazos ante la injusticia, deseando que los derechos de los estudiantes secundarios sean cumplidos. Estos chicos, de entre catorce y dieciocho años aproximadamente, que vivieron en el gobierno de 1976, fueron secuestrados y torturados por las fuerzas de seguridad, y todavía siete de diez que estuvieron detenidos, están desaparecidos. Desaparecidos por ser jóvenes que creían en un mundo libre e igualitario. Quines lucharon por sus ideales y se enfrentaron al terrorismo para defender nuestros derechos: los de los estudiantes. Exclamando y protegiendo lo justo y enfrentándose a las injusticias, estos chicos, como nosotros, participaron en centros de estudiantes o en agrupaciones con el propósito de cambiar un poco el sistema que hace quee unos tengan mucho y otros muy poco. Nuestro rol como jóvenes hoy es no caer en una sociedad individualista, donde el dolor no se siente mientras que le toque a otro, y sean pocos los que se preocupen por los hechos injustos que suceden. Comenzar a enfrentar el miedo que persigue a los jóvenes para que no se organicen, para que no piensen y no opine. Enfrentar al sistema que hace treinta y tres años viene persiguiendo el idealismo, desterrando las inquietudes sociales, sepultando la solidaridad, con el fin de formar jóvenes con conceptos frívolos y materialistas, despreocupados por lo que sucede a su alrededor.Estamos presentes. Somos capaces de seguir defendiendo nuestros derechos y los de nuestros compañeros. Pelear contra los sistemas educacionales impuestos, por que queremos que se eduquen y se financien las escuelas. Entendamos que solamente juntos, participando, lograremos una educación que beneficie para transformarnos en personas críticas y libres. Ahora, es el momento de decidir para construir el futuro que deseamos. Pelear porque sea para todos y no unos pocos, y sobre todo que nos de las herramientas de mañana. Por eso fortalecer hoy la lucha de los secundarios y todo estudiante que exigen una beca para estudiar, un boleto con costo mínimo y sobre todo para que se respeten el derecho de aprender en condiciones, sin frío y sin hambre. Pelear para que la escuela nos eduque y sea la herramienta de conocimiento y libertad, y así también deje de ser una herramienta dominación. Es el camino que se logrará siendo incorruptibles y siempre reflexionando para no abandonar estos objetivos, y el compromiso para sacar a nuestro pueblo de la opresión provocada intencionalmente en la limitacion de educación. Y todo esto lo logramos porque sabemos que rol cumplimos y que expectativas tenemos. Los lápices siguen escribiendo…, siguen levanto las mismas banderas de los jóvenes que lucharon por la libertad, la igualdad, la paz y la justicia.A no rendirse, hasta la victoria siempre. Para todos aquellos que no consideran una utopía proponer un mundo donde sea más digno vivir.

Juventud Socialista de Morón. “Ernesto Guevara”


Centro Alfredo Bravo.

martes, 15 de septiembre de 2009

jueves, 10 de septiembre de 2009

jueves, 3 de septiembre de 2009

viernes, 21 de agosto de 2009

"El enemigo interno".

Sale en las noticias, escuchamos supuestos periodistas comentando lo sucedido agregando con previo juicio “supuestamente era menor de edad” sin fuentes exactas. A diario sobre menores que comenten actos delictivos, que aturden en vez de informar para, y de ese modo, los especialistas del sistema penal, de amplios sectores políticos y de medios de comunicación, amparados en el paradigma de la seguridad-inseguridad, con claros criterios de “defensa social”, han construido casi excluyentemente un solo “enemigo interno”: los adolescentes y jóvenes varones pobres.
Los medios, sobre todo, han aportado mucho a que esta “nueva derecha” (que no es más de la misma con distinto eslogan), con el objetivo del cambio hacia un Régimen Penal Juvenil al avance correctivo de la baja de edad de imputabilidad. Es hipócrita, aún sabiendo que el sistema penal, desde todas y cada una de sus agencias, policía-justicia-ministerio público e instituciones de encierro, afirmen que respetan los derechos fundamentales y otorguen las debidas garantías a quienes ingresan a las mismas; sólo bastaría recorrer cada comisaría, fiscalías, institutos, etc. para poder demostrar si es que se cumplen dichas garantías y derechos. Por que, bien podemos citar a la abogada defensora Abogada de la Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (Correpi), María Caramen Vardú, explica que está demostrado que en Argentina no hay actividad delictiva –desde el crimen organizado hasta el raterismo– que no presente algún punto de conexión con el sistema represivo del Estado. Enormes cantidades de hechos relacionados con la inseguridad, cada vez más personalizada en las figuras de los jóvenes, tienen que ver con zonas liberadas por la policía, y hasta incluso tienen como protagonistas a miembros de esa fuerza. Los ‘escuadrones de la muerte’ matan sólo a los chicos que no roban para ellos. O sea que mientras generan el delito, atacan y castigan al más pequeño eslabón. El sistema penal actual afecta a todos los chicos ya que lo último que hace es proteger sus derechos, y menos de los chicos pobres. Los chicos de familias de más recursos tienen un excelente abogado y, en caso de internación, terminan en una clínica privada donde los tratan mejor que en su casa. El problema es de los menores pobres y la solución para eso está en la modificación del esquema social.
Pero es este sistema penal que ha respondido, responde y responderá a las exigencias de una política penal y criminal que el orden social dominante demanda para gobernar el malestar social, ejerciendo la direccionada persecución penal de aquellos que el propio sistema capitalista ha decidido expulsar fuera del mercado, en nuestros tiempos, las claras víctimas de un proceso de desigualdad sin precedentes producto de las políticas neoliberales que llevan más de 20 años de desarrollo, que tendrá como consecuencias (entre otras) más del 49% de los niños, niñas y adolescentes de 0 a 17 años bajo la Línea de Pobreza, de los cuales el 20%, están bajo la línea de la indigencia, se pueda siquiera considerar que las garantías y el respeto a sus derechos recién se cumplan una vez cometido un delito y que el ingreso al sistema penal signifique el comienzo de una vida plena como “sujeto de derechos”.
Esta discusión no se escucha en la agenda de los medios, el Estado se lava las manos respecto del escenario que reproduce el clima de marginación y delito. Estos pibes son íntimos al sistema de exclusión, y no hay dónde mandarlos. O los mata el encierro humillante o los mata la calle, bajo el gatillo fácil de la policía o algún escuadrón urbano. Es la forma en que el poder resuelve, o cree resolver, los efectos de su barbarie, con el aval de una calase media asustada que en definitiva, soladamente puede decir estupideces y reclamar soluciones inmediatas, individualistas sin un análisis y menos que este trate de integrar a los que menos tienen.. Completando con la prédica comunicacional cotidiana, incansable, virulenta, que se pretende simple espejo de lo que ocurre mientras alienta todos los valores de mierda capaces de asentar y multiplicar la injusticia social: la abundancia de riqueza, el consumismo desaforado, la frivolidad analítica, la violencia como show bien pagado por el rating y, después, provocar más recelo entre quienes no pueden “pertenecer” a este sistema el mismo que los dejó mirando desde afuera.
Para terminar, oponiendo a los palabrerios de la derecha, debemos re-veer el tema cuidadosamente pero en sí entender que no resuelve el problema del delito, la violencia y la inseguridad bajando la edad de imputabilidad de los más chicos, como tampoco lo ha resuelto con los que ya son vergonzosos a pesar de promover un crecimiento exponencial del sistema penal que sólo acaba en el uso abusivo y generalizado de la prisión preventiva, los malos tratos y torturas y las ejecuciones sumarias de las diversas agencias policiales.
Las garantías y respeto de los derechos fundamentales se sostienen a partir del desarrollo a mediano y a corto plazo de políticas económicas y sociales distributivas que vayan hacia la disminución drástica de la pobreza y la indigencia de los niños, adolescentes, jóvenes y sus familias y con programas de asistencia y contención que aborden con carácter urgente problemas graves que los afectan. Es vital para que brinden más oportunidad y más INCLUSIÓN.

Juventud Socialista de Morón.
Fuente: Observatorio de Adolescentes y Jóvenes y Grupo De Estudios sobre Sistema Penal Y Derechos Humanos (GESPyDH)

viernes, 14 de agosto de 2009

CAUSA PENAL POR AFILIAR A CIUDADANOS FALLECIDOS

Cuatro afiliados al socialismo bonaerense pertenecientes al sector que lidera el senador nacional Rubén Giustiniani fueron imputados penalmente por la justicia por presentar fichas de afiliación de ciudadanos fallecidos. Julio Ghione, Martin Morichetti, Pablo Melgarejo y Adriana Kreiman, todos ellos designados por el interventor en el Partido Socialista (PS) de la provincia de Buenos Aires, Carlos Maniero, para certificar la legalidad de las fichas de adhesión al PS de ese distrito, están sometidos a proceso penal por parte del juez federal Arnaldo Corazza (Juzgado Federal N° 3 de La Plata).



Los dirigentes Ariel Basteiro y Oscar González, integrantes del sector mayoritario del PS bonaerense que lidera el diputado nacional Jorge Rivas, revelaron que “con el ánimo de engrosar apócrifamente el padrón partidario ante la inminencia de las elecciones internas que se vio obligado a convocar” el interventor partidario “autorizó la inclusión de fichas con los datos de al menos ocho ciudadanos fallecidos. Los imputados por el delito de falsificación de documento público podrían ser condenados a penas de hasta seis años de prisión”, según lo dispone el Código Penal.



La causa penal - que lleva el número 16.121- se carátula “Partido Socialista s/afiliaciones comprobadas a ciudadanos fallecidos” y fue abierta por instrucción del juez federal con competencia electoral de La Plata, Dr. Manuel Humberto Blanco.



El socialismo bonaerense fue intervenido en septiembre del 2008 a instancias del presidente partidario, el senador Rubén Giustiniani, como represalia por la posición política asumida por el congreso del PS provincial y llevado adelante por las autoridades de entonces, que resolvió participar de las elecciones de 2007 en la alianza Frente para la Victoria.



Los imputados pertenecen a cuatro distritos diferentes: Ghione es de La Plata, Morichetti de Bahía Blanca, Melgarejo de Almirante Brown y Kreiman de Morón.



Para ambos dirigentes socialistas “este episodio demuestra cabalmente la catadura moral de quienes no trepidan en pedir nuestra expulsión y la de Jorge Rivas, por el solo hecho de expresar nuestra disidencia con quienes aspiran a conducir al PS hacia la coalición derechista de Elisa Carrió y Patricia Bullrich”.

miércoles, 11 de febrero de 2009

Centro Cultural America Morena

Estamos trabajando en la creación de un centro cultural dentro de la casa del pueblo de morón. El mismo está conformando como un lugar democratico, participativo y abierto a la comunidad toda, donde por supuesto confluyen ambos espacios en una misma linea en común. Nuestro fin es poder brindar actividades culturales y sociales totalmente gratuitas, siendo este un espacio de referencia para las mismas, donde habrá talleres semanales de todo tipo, una bibloteca popular, un grupo de teatro comunitario, un grupo muralista, recitales acústicos, eventos artisitcos, un cafe literario que nuclea todo tipo de actividad de lectura y audiovisual.

Con una gran impronta latinoamericanista, nos comprometemos con las causas y luchas de independencia y autodeterminacion de los pueblos de la America Morena, nos sentimos parte una misma nacion y estrechamos lazos de solidaridad y compromiso con los pueblos orginarios, los movimientos sociales, campesinos sin tierra, movimientos culturales y artisticos contra hegemonicos, etc.

Los invitamos a participar, a utilizar el centro cultural para realizar talleres, reuniones, actividades, a que sea un lugar de encuentro, y tambien invitarlos todos los sabados a partir de las 15 hs, para quien desea acercarse, darnos una mano y ser parte de este proyecto.